sábado, 15 de abril de 2017

Tokio Blues



Me gusta mucho Haruki Murakami, encuentro que escribe muy bien. Con esto me refiero a que si bien el contenido de sus historias es denso y nos hace pensar bastante, como una lectura canónica, la prosa es fácil de seguir, no es complicada, te sumerge de lleno en su mundo sin mayores complicaciones. El ritmo que le da a sus relatos, como va describiendo una escena hace que sus libros sean únicos.
Ahora, Tokio Blues tiene todo esto, me encanto por todas estas cosas. Pero encuentro que para mi fue demasiado gráfico en la descripción de algunas escenas, muy bien abordadas, pero me impactaron un poco que fuera tan abierto a ese tipo de descripciones. Vale decir que nunca me había encontrado con un libro de Haruki Murakami que fuera tan realista dentro de la ficción. 
Se menciona al Guardián entre el Centeno en una parte del libro, y es ahí cuando yo pude minimizar ese impacto que las escenas me habían provocado, porque entendí que va dentro de ese tipo de novela, enfocada en un lado de la historia del personaje que lo marca, con un cierto matiz.
No lo volvería a leer por ahora, voy a dejar un tiempo, pero sin duda que merece una segunda lectura. 

sábado, 8 de abril de 2017

Expedición a la Tierra del Fuego



Titulo: Expedición a la Tierra del Fuego
Autor: Martín Gusinde
N°Páginas: 139
Editorial: Universitaria


Como bien lo indica el titulo del libro, este trata de una serie de cuatro expediciones que hiso el propio Martín Gusinde a Tierra de Fuego. Estas cuatro expediciones están registradas como un informe, cada una sucedida en diferentes años, el primero de ellos realizado en 1918, el segundo en 1920, el tercero en 1921, y finalmente el cuarto en 1922, y 1923. En cada una de estas expediciones se encuentra con Onas, Yaganes, y unos pocos Alacalufes. De estos aprendemos de los primeros sus costumbres, algunas tradiciones, mitos, y ritos por los cuales deben pasar los jóvenes. 
Se habla de cómo los hombres cada cierto tiempo se retiran del lugar donde se encuentran y aparecen disfrazados de espíritus para asustar y controlar a las mujeres. En tiempos antiguos esto sucedía de forma contraria, pero se cuenta que un hombre asesinó a estas mujeres y dejó sólo viva a una, la Luna, que habría escapado con quemaduras al cielo, y desde ese entonces que son los hombres quien hacen esta especie de rito.
Gusinde no da muchos detalles de sus expediciones en un principio, pero a medida que avanza notamos más contenido. Esto se debe, como explica él mismo, que para poder acceder a cierto tipo de información debe ganarse primero la confianza de los Onas o Yaganes , puestos que son desconfiados de extraños.